Las plantas del género lavandula se utilizan desde antiguo como plantas ornamentales, medicinales, aromatizantes y condimentarias, así como para la obtención de esencias. Las variedades más utilizadas y conocidas son el espliego (lavandula angustifolia) y la variedad cultivada (lavandula officinalis), que responden a los nombres vulgares de lavanda, lavándula, alhucema, espliego o espigolina.
La lavanda es una planta silvestre que crece abundantemente, originaria del oeste de la cuenca mediterránea; es una excelente planta melífera y una de las plantas más aromáticas, ya que contiene hasta un 3% de aceite esencial perfumado. Contiene alcanfor, acetato de linalino, geraniol, borneol, eucaliptol, nerol, limoneno, farneseno, etc., así como un 12% de taninos, saponinas y ácidos caproico, butírico, cumárico, isobutírico, rosmarínico y ursólico. Las flores secas sirven para perfumar la ropa y ahuyentar las polillas. Es un excelente aditivo perfumado y uno de los componentes del agua de colonia.
En la antigüedad fueron los romanos quienes generalizaron el uso del aceite de lavanda en el agua de baño; de hecho, el nombre de lavandula lo acuñaron ellos, ya que proviene del vocablo latino lavare, que significa lavar. En la Edad Media, fue la medicina monacal la que introdujo la lavanda en los botiquines, aplicándose tópicamente contra los piojos; aunque también se utilizaba, entre otras cosas, para tratar dolores articulares, el dolor de muelas, la apoplejía, la lipotimia, las palpitaciones y la ictericia. La creencia popular decía que la lavanda protegía incluso contra los demonios.
El aceite de lavanda forma parte de la composición de algunos preparados antirreumáticos. Por su baja toxicidad se puede emplear directamente sobre cualquier piel. Es muy polivalente y estabilizante, calmante, regulador y antiinflamatorio. Muy apto para cualquier problema cutáneo que se necesite calmar. Es muy utilizado en aromaterapia y es, a su vez, cicatrizante, ayuda a las quemaduras y es muy bueno para el insomnio, la ansiedad y los nervios. También tiene efectos antisépticos, desodorantes, contra las infecciones de garganta y se utiliza para tratar torceduras y esguinces; reactiva la circulación, alivia el cansancio y es útil para tratar las flatulencias y trastornos intestinales.
El aceite esencial es muy utilizado en la farmacopea y la cosmética para preparar pomadas, cremas, enjuagues bucales, perfumes y aguas de colonia. También se utiliza para las picaduras de insectos, las llagas, cistitis, dolores reumáticos, dolores lumbares, tortícolis, dolor de cabeza, dolor de pies. Cura las heridas y mejora el estado de la piel, favoreciendo la curación de eccemas, psoriasis, hematomas, sarna... También es bueno para evitar la caída del cabello. Igualmente, es utilizado para tratar trastornos del sistema respiratorio, ya que se ha mostrado eficaz para la bronquitis, la gripe y los resfriados.
Fuentes:
- Atlas ilustrado de Plantas medicinales y curativas. Susaeta.
- Diccionario de plantas medicinales. NVG.
- Guía práctica de aromaterapia. Joan Cano, 2008.
- Jabones naturales para hacer en casa. Mar Gómez, 2009. Ed. Océano.
- http://es.wikipedia.org/wiki/Lavandula
- http://articulos.infojardin.com/aromaticas/Fichas/Lavanda.htm
- http://www.botanical-online.com/medicinalslavanda.htm
- http://www.botanical-online.com/medicinalsespliego.htm
- http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/druginfo/natural/838.html
- http://salud.ellasabe.com/plantas-medicinales/19-lavanda-propiedades-relajar-los-nervios
- http://www1.etsia.upm.es/departamentos/botanica/fichasplantas/lavhab.html